¡Hola, amantes de la lectura! ¿Cómo estáis? ¿Qué tal os está yendo la semana? Espero que muy bien. Hoy os traigo la reseña parte de Tu nombre después de la lluvia, primera parte de la trilogía Dreaming Spires, escrita por Victoria Álvarez. ¡Empezamos!
Corren los primeros días de enero de 1903 y el profesor Alexander Quills, un hombre sabio y triste, vuelve a su casa de Oxford después de asistir a unas conferencias en Londres; Oliver Saunders, joven y tímido, mientras tanto trabaja en su pequeño cuarto de Balliol College, rodeado de diccionarios y novelas góticas, y Lionel Lennox, amante de la buena vida y de las faldas ligeras, está en Egipto, a punto de profanar la tumba de una princesa para llevarse una joya de inestimable valor.
Poco tienen en común los tres amigos, excepto el cariño que les une y el interés por las nuevas ciencias que exploran el mundo del más allá. Muy pronto sus ganas los llevarán a Irlanda, una tierra plagada de leyendas, donde las piedras tienen una historia que contar y el sonido de la lluvia se confunde con el llanto de unas mujeres que cuidaron de sus seres queridos incluso más allá de la muerte.
Heredera de La dama de blanco de Wilkie Collins, Tu nombre después de la lluvia es una novela de misterio y aventuras que nos devuelve a la mejor literatura del siglo XIX.
Después de leer varias novelas suyas, Victoria Álvarez se ha convertido en una de mis autoras españolas favoritas y, por eso, no podía desaprovechar la oportunidad de hincarle el diente a esta trilogía suya. Y, por supuesto, este primer libro no me ha decepcionado. Aunque si bien es cierto que el inicio es demasiado introductorio para mi gusto, creo que la autora recrea muy bien ese ambiente propio de la novela gótica; por no hablar de lo bien desarrollados que están los personajes. Pero vamos a ir paso a paso. Además, tengo que advertiros que esta trilogía (Dreaming Spires) y la de Helena Lennox —publicada por Nocturna Ediciones y cuyo primer libro se titula La ciudad de las sombras— están conectadas de alguna manera. En este sentido, es recomendable primero leer esta y después la de Helena Lennox (básicamente, para enterarnos mejor de algunas cosas que se mencionan), pero tampoco es requisito indispensable; se pueden leer independientemente (es más, yo primero leí Helena Lennox).
Oxford, 1903. Alexander, Lionel y Oliver son tres amigos que trabajan en Dreaming spires, un periódico especializado en explicar de manera científica los sucesos paranormales y todo lo que tenga que ver con el más allá. Sin embargo, el periódico no está pasando por un buen momento y puede que desaparezca si no se pone cuanto antes una solución.
No obstante, después de volver de una conferencia en Londres, Alexander Quills recibe una extraña carta donde una misteriosa mujer les invita al pueblo de Kilcurling (Irlanda) para que investiguen a una banshee que tiene aterrorizados a sus habitantes. La banshee —criatura del folklore irlandés que anuncia la muerte de alguien a través de llantos y gritos—, en realidad, pertenece al clan de los O'Laoire y exclusivamente presagia la muerte de aquellas personas que pertenezcan a dicho clan, pero, por una inexplicable razón, recientemente, la anunció de alguien fuera del clan.
Al ser la mejor y única opción que tienen para sacar el periódico a flote, los tres amigos no durarán ni un segundo en ir a Irlanda e iniciar una peligrosísima investigación que cambiará el rumbo de sus vidas.
Como ya os he mencionado anteriormente, Tu nombre después de la lluvia es una lectura que no me ha decepcionado; al contrario, me ha gustado mucho. La pluma de la autora es exquisita, y la manera de narrar los sucesos y de describir los ambientes en los que se desenvuelven los personajes es, simplemente, sensacional. Ahora bien, tengo que advertiros que este libro no destaca, precisamente, por tener un ritmo de lectura ágil y fluido; al contrario, más bien tiene un ritmo pausado, lento, y esto se nota, sobre todo, en la primera parte del libro. Obviamente, esto, como en todo, tiene su parte positiva y negativa. Lo bueno es que la autora se toma su tiempo en presentarnos a los personajes —sus respectivas historias, personalidades, ocupaciones…—, el contexto en que viven, los escenarios en los que se mueven, el tipo de relación que tienen los tres protagonistas de la historia, etc. Y lo malo —y este es el único punto negativo que le voy a poner a esta historia— es que la primera parte del libro es demasiado introductoria, e, incluso, hay partes, a lo largo de la novela, que son algo tediosas. Personalmente, esto no me ha supuesto un gran problema porque yo ya conocía el estilo de la autora (y sé que, en el inicio de sus novelas, suele detenerse mucho en presentar a los personajes, en explicar bien la ambientación en la que se desarrolla la trama, en ahondar en detalles, etc.), y, aunque yo prefiero los libros con un ritmo ágil y frenético, en este caso, no me ha molestado que la lectura sea lenta y pausada (pero eso no quita el hecho de que, objetivamente, sea un libro demasiado introductorio y tedioso, y no sea para todo el público lector). No obstante, no os desesperéis; una vez pasada esa primera parte, la cosa empieza a ponerse más interesante, aparecen nuevos personajes, los misterios empiezan a aflorar, y el ritmo se vuelve algo más trepidante.
Una de las cosas en las que destaca Victoria Álvarez es en la construcción y el desarrollo de sus personajes. Es una maestra en la creación de estos, y, obviamente, esto se ve reflejado en su obra. ¿El resultado? Unos personajes bien creados, construidos y desarrollados, y me refiero tanto a protagonistas como a personajes secundarios. En cuanto a personajes principales, tenemos a Alexander, Lionel y Oliver, tres amigos con personalidades muy dispares y con muy pocas cosas en común, excepto el cariño que les une y el interés por lo paranormal. De los tres, el que más me ha llamado la atención ha sido Alexander, un hombre curioso, sabio y melancólico, cuyo pasado le persigue y le atormenta. Es quien aporta racionalidad a este pintoresco grupo, y, seguramente, sea el personaje con el que haya conectado más (y haya sentido más empatía) por su trasfondo e historia. Después, tenemos a Lionel, personaje que ya conocía de la otra trilogía. Es descarado y mujeriego por naturaleza, pero sus ocurrencias nos sacará más de una sonrisa. Por último, tenemos a Oliver, el idealista y soñador del trío (y el que menos me ha convencido); un personaje que adora el romanticismo y las novelas góticas.
Los personajes secundarios —sobre todo, los femeninos— van a cobrar una especial relevancia dentro de la historia. Entre todo ellos, voy a destacar a Briannon O'Laoire, una mujer de armas tomar y de naturaleza desconfiada, quien no durará ni un segundo en proteger a su hija, Ailish, de cualquier mal. También tengo que hacer una especial mención a la señorita Stirling, una mujer envuelta en un aura misteriosa, que, seguramente, cobre un mayor protagonismo en los siguientes libros de Dreaming Spires.
Pero Victoria Álvarez no solo destaca por la construcción y desarrollo de los personajes, sino también por el gran trabajo de investigación y documentación que realiza para poder desarrollar un aspecto tan importante —para una novela de este calibre— como es el de la ambientación. En este aspecto, la autora no se corta ni un pelo en darnos todo lujo de detalles del contexto histórico (principio del siglo XX) y de los diversos lugares que aparecen en la novela (Egipto, Reino Unido e Irlanda). Gracias a esto, el lector puede recrear perfectamente en su cabeza los diferentes escenarios por los que se van moviendo los distintos personajes. Asimismo, como ya he mencionado anteriormente, la autora recrea de manera magistral ese ambiente propio de la novela gótica que se traslada, sobre todo, a los escenarios de Irlanda. Además, la autora nos regala descripciones espectaculares sobre estas tierras tan mágicas, además de ahondar en aspectos sobre la cultura irlandesa, sus costumbres, sus leyendas (sobre todo, aquellas que tiene que ver con las banshees), etc.). Obviamente, el elemento paranormal está presente a lo largo de la novela, pero no es tan primordial y/o importante como, aparentemente, se deja entrever en un principio.
En conclusión, Tu nombre después de la lluvia de Victoria Álvarez es una novela que no me ha decepcionado; al contrario, me ha gustado mucho (como cualquier libro de esta autora). Como ya he dicho antes, es cierto que, siendo objetiva, es una historia con un ritmo muy pausado que, en ocasiones, peca de ser tediosa en algunas partes, pero, por las razones que he expuesto en la reseña, a mí esto no me ha supuesto un mayor problema. No obstante, esto se ve compensado con unos personajes entrañables y bien desarrollados y una ambientación espectacularmente bien creada.
Créditos:
Imagen 1: https://www.pinterest.es/pin/230950287131711877/.
Imagen 2: https://www.deviantart.com/liigaklavina/art/Banshee-743234975.
¿Habéis leído este libro? ¿Os gustó? Si no lo habéis leído, ¿os ha llamado la atención? ¿Le daréis una oportunidad?
Airin Bartt